Una partícula de luz


“ Una partícula de luz al activarse tiene la capacidad de recordar e iniciar una activación en cadena de aquellas que están alrededor y así sucesivamente, la memoria de luz se va expandiendo. Les decimos que logran activaciones sólo momentáneas ya que no hay una consecuencia permanente en su actuar diario.

Refuercen la consecuencia entre sus palabras y sus actos con el fin de ir logrando períodos mayores de conexión lumínica, que no es otra cosa que un estado de amor expandido.

Al vivenciar el amor se activa la luz que une sus diferentes cuerpos más densos y sutiles y los conecta por instantes a esa dimensión donde los tiempos ya se han encontrado.
Mediten y comprendan estas palabras ya que podrán establecer pautas personales para aplicar en su día.

Estas partículas de luz conforman una red que ya está conectada en sus cuerpos más sutiles, donde su conciencia está integrada, no así en el plano físico ya que aún hay división en su conciencia.»